He prometido a mi niño que mañana vamos a ir al Castillo (sí, otra vez).
- Cariño, ¿cuándo seas mayor quieres ser arqueólogo?
- Mamá, no sé que es arqueólogo.
- Pues como Tadeo Jones, los que desentierran castillos.
- Uff, no mamá, eso es peligroso, porque imagínate que encuentro un hormiguero y se enfadan las hormigas y se me suben todas encima.
- Ay, sí, eso es demasiado peligroso.