DAVID Y SU NUEVA MANERA DE ACABAR CON EL LOBO

Ayer estuvimos jugando al escondite, David se escondía y yo le buscaba. Pero David es impaciente para que le encuentre... Así que se puso a aullar: auuuu, auuuu. Le encontré!!!

- Verdad mamá que los lobos dan mucho miedo.
- Sí, pero no pasa nada porque viven en el monte.
- Pues si un día viene un lobo lo que puedes hacer es hacer mamá es darle un manotazo y entonces se asusta. O sino mamá, le das una patada en el culete y se marcha corriendo, jajaja.

Se queda pensando...

- Pero sabes que es mejor, mamá, haces sopa super caliente super caliente, y cuando llegue el lobo se la tiras encima y el lobo se asusta y se va corriendo. Y luego mamá limpias del suelo la sopa que se ha caído.


Jajaja

DAVID EN EL HOSPITAL

A veces los niños hacen trastadas sin tener ni idea de las consuencias que le pueden traer. Menos mal que sólo fue ir al hospital...

Historia del hospital contada por David

Mamá hemos ido en el autobús y hemos entrado por una puerta muy rara (entrada de urgencias) y había una puerta muy rara ¿qué sabes cómo se abría? Con un interruptor, no era empujando.
Ha venido una chica y la hemos contado lo que me pasaba. 

La chica se llama como el médico de cerca (centro de salud), ¿pediatra? Sí, esa chica se llama pediatra.

Y hemos ido por un sitio muy raro ¿y sabes dónde hemos llegado? Al número 6 (consulta del otorrino) que está al lado de la médica de los ojos, pero no ponía oftalmóloga, había un cartel que ponía "Enfermera operar" o algo así.

Y una chica ha cogido unas pinzas y me ha sacado las piedras, y me ha hecho daño con las pinzas muchísimo. La chica me decía que me estuviera quieto, mamá y yo pues así (se queda quieto). Y luego ha cogido una jeringuilla con agua caliente, bueno templada, y han salido unas piedras, pero no me las han dado porque se han caído por la fregadera.

- Ay David, ¿y te han hecho daño con la jeringuilla?
 

- No, hacían mucho ruido. (Las piedras caían en una bandeja metálica)
 

- ¿Ahora te duele algo?
 

- No, mamá.
 

- Has sido muy valiente. ¿No has llorado?
 

- No, mamá, nada de nada.

En una pequeña gasa me enseña las piedrecitas. Mamá aquí hay poquitas, porque las pequeñitas se han caído por la fregadera, y alguna había llegado al tímpano, pero mamá ¿qué es el tímpano?"

 

 

EL REGALO DE CUMPLEAÑOS DE MAMÁ

El domingo día 30 de septiembre fue mi cumpleaños, y esta es la historia del regalo más bonito que me ha hecho mi campeón David... Os cuento...

Viernes día 28 de septiembre, David y yo estábamos cenando y le preguntó. ¿Qué me has comprado para mi cumpleaños?
- "Mamá, los regalos de cumpleaños son sorpresa. Sólo se pueden pedir los regalos de Papá Noel y de los Reyes Magos".
Se queda pensativo y me dice: "Mamá, es que no te he comprado nada"
Le contestó: "No pasa nada porque mañana podemos ir juntos y así me lo compras".
- "No, no, no. El regalo de cumpleaños no lo puedes ver, es sorpresa."
Sigue pensando y empieza una larga explicación: "Pero podemos hacer una cosa mamá. Vamos a la tienda y tú cierras los ojos y así no ves el regalo y yo lo compro, así no lo ves, pero tienes que esperar al día 30 para abrirlo, lo tengo que guardar porque no lo puedes abrir"
Le digo: "Mañana por la mañana ya pensamos lo que hacemos con el regalo"


Sábado 29:

- Mamá, ¿sabes lo que podemos hacer para comprar tu regalo?
- Dime
- Pues tú me acompañas a la tienda y me esperas en la puerta y así yo entro y compro tu regalo. O sino entras conmigo porque no quiero quedarme solo en la tienda y cierras los ojos. Y ya está. Yo compro el regalo y tú ya puedes abrir los ojos.
- Me parece buena idea.
- Pero ¿has pensado a qué tienda vamos a ir?
- Pues mamá, a una de collares, porque estás muy guapa con collares.
Desayunamos y nos vamos para una tienda de bisutería. En la puerta me dice David: "Mejor mamá tú te quedas mirando para la carretera y me das el dinero y te compro el regalo".
Entré simplemente a la tienda para decirle a la dependienta que atendiera al niño porque quería comprarme un regalo, pero yo no lo podía ver. Le di un billete a David para que pagara. Y me salí.
Desde fuera y a través del escaparate pude ver a David como agarraba fuerte el billete y hablaba con la dependienta. Con lo tímido qué es, no sé cómo sería la conversación, porque lo mismo sólo dice monosílabos como le da por hablar y se explaya...
Al rato vi que iban hacia el mostrador y entré.
- Mamá, ya está, ya puedes entrar.
La dependienta se reía, no sé si por la situación, o por la iniciativa del niño. La di las gracias.
- Mamá, yo llevo tu regalo y tú llevas el dinero que ha sobrado. Pero no te puedo decir lo que te he comprado porque es sorpresa, lo tienes que dejar en casa, porque no lo puedes abrir hasta mañana.
- Vale.
- Bueno, te voy a decir sólo una cosa, es de color... rojo.
- Bien, me encanta el color rojo.
- Por eso mamá, porque yo ya sé que tu color favorito es el rojo, porque yo lo sé, porque lo has dicho muchas veces. También me ha dicho la chica de la tienda que si no te gusta, que puedes venir y cambiarlo.
- Seguro que no hace falta, porque es un regalo muy bonito.
- ¿Por qué te lo he comprado yo, mamá?
- Claro, porque tienes muy buen gusto. 
Él siguió todo el camino hablando, era la emoción:
- ¿Verdad mamá que soy muy mayor porque te he comprado el regalo yo solo y además he pagado yo solo?
- ¿Sabes? No me ha dado miedo entrar solo en la tienda.
- ¿Verdad mamá que no sabes lo que te he comprado porque has mirado a la carretera?


Lo que no sabía David es que esos apenas 3 minutos que había tardado en comprarme el regalo y que yo había estado "fisgoneando" ya me hacían la mamá más feliz del mundo. Y para mí ya eran el mejor regalo del mundo.

DAVID Y EL BAR QUE HAY DE TODO

Ya sabéis que David tiene unas ocurrencias... y además es insistente, jajaja. Llevaba ya unos días que me decía "mamá, te tengo que enseñar un bar que tú no conoces y que hay de todo, de todo". Y me explicaba "Es un bar que está cerca de la M, y cerca de la máquina de tren que ya no funciona". Todos los días la misma canción. Incluso si se enfadaba me decía "Por portarte mal, ya no te voy a llevar al bar que hay de todo".

Ayer llegó el gran día, le llevé por el camino más rápido a la M, y desde allí él me dirigió al bar. Cuando llegamos me enseñó todo el bar "¿Verdad mamá que es bonito este bar que hay de todo?" Jajaja

Me enseñó los baños. Y me explicó una cosa que yo no sabía: "La luz del baño de las chicas está fuera, porque a las chicas les da miedo la oscuridad; pero la luz del baño de los chicos está dentro, porque a los chicos no les de miedo la oscuridad" Jajaja, hay que reconocer que tiene explicación para todo.

Le pregunté con quién había ido al bar, y me dijo que con los tíos y el primo Álvaro.

Por la noche, descubrí el comienzo de la historia. El otro día fueron a ese bar y su tía Carmen le preguntó a David que quería tomar, y él preguntó que qué había, su tía le contestó "Hay de todo".

CONCLUSIÓN: DAVID HA ENCONTRADO UN BAR QUE HAY DE TODO

OLA DE CALOR

Hoy he ido a buscar al cole de verano a David y hemos visto un termómetro a 40ºC.

"Verdad mamá que 40 es el tope, que más número te mueres." Siempre le digo que la fiebre es mala y que a 40ºC los niños se mueren y por eso hay que tomar Dalsy.

Cuando ha llegado a casa de mis padres, le dice a mi madre "Yaya, hay 40ºC, hace mucho calor como en Bilbao, pero sabes, en Sevilla hace mucho más de calor y con ese calor te mueres"

 

 

EL RATONCITO PÉREZ TIENE TRABAJO CON DAVID

Ayer fue el segundo diente que se le ha caído a David. El primero fue el pasado lunes. Día emocionante para él y para todos los que estamos con él.

Era lunes y el yayo Jesús fue a buscarle al cole, "Yayo este diente se mueve mucho" le dijo David y estaba casi suelto, así que tirando un poquito se soltó y sangró... Desde ese día nos enseña la sangre en la acera. El diente "fuerte" estaba ya empujando al diente de leche.

- ¿Verdad mamá que tú tienes dientes "fuertes" porque ya eres mayor?
- Sí, cariño.
- ¿Y cuándo se caen los dientes de mayores viene el ratoncito Pérez?
- No, hijo, a los mayores ya no nos trae regalos, además ya no salen más dientes.
- ¿Y te quedas sin dientes?
- Bueno, tienes que ir al dentista para que te pongan dientes de mentira o dentadura postiza.
- Ufff, mamá, pues yo voy a cuidarme mucho mis dientes "fuertes" porque no quiero ir al dentista.

Esa tarde cuando llegué de trabajar sólo hablaba del ratoncito Pérez.

- Mamá, ¿por dónde entra el ratoncito Pérez? Porque Papá Noel entra por la chimenea, y los Reyes Magos entran por la ventana, pero el ratoncito Pérez no sé.
- Creo David que hace magia, además es tan pequeño que seguro que cabe por cualquier hueco.

Nos fuimos a la cama. Dejamos el diente metido en un joyero para que no se perdiera debajo de la almohada. Pero David estaba preocupado. "Mamá y si no puede abrir el joyero y no coge el diente y se va y no me deja una moneda", yo le tranquilicé: "El ratoncito Pérez es muy listo, ya verás"

Todas las noches nos metemos juntos en su cama y yo le leo un cuento. "Mamá hoy mejor me meto yo en tu cama, que sino tú pesas mucho y me aplastas el diente"

Esa noche no durmió bien, creo que soñaba, le oía que hablaba, estaba inquieto. A las 4 de la mañana se despertó. "Mamá, dame la luz", se me quedó mirando. "Hay algo debajo de la almohada" dijo medio dormido. Era una hoja escrita, una nota del ratoncito, entonces la leí: "Querido David, como te portas tan bien y eres muy listo, te he traído un regalo tan grande que no cabe debajo de la almohada, así que te lo he dejado debajo de la cama". David estaba demasiado entre sueños todavía, así que no hizo más que darse la vuelta. "Vale mamá, voy a dormir".

DAVID PREOCUPADO POR SU PROFE NUEVA, QUE ES DE BURGOS

Ayer fuimos a hablar con la profe nueva de David, hasta ahora había tenido a Pili durante 1º de Infantil y en 2º hasta más o menos abril. Pero durante unos meses han estado cambiándole de profe hasta que ha venido la definitiva. Se llama Yolanda. La reunión con ella muy bien, me pareció muy tierna y nos habló muy bien de David, está muy motivado y es muy aplicado. Nos comentó que es de Burgos y que viene todos los días a Miranda y regresa a Burgos con algunas profesoras más que están en el mismo colegio.

Por la tarde, le conté a David que había hablado con su profe, y que es de Burgos. La conversación fue graciosa.
- Sabes, David, esta mañana he estado con Yolanda, me ha dicho que es de Burgos.
- ¿Y dónde vive?
- Vive en Burgos y todos los días viene con otras profesoras de tu cole de los mayores y luego vuelve a su casa.
- Pero su casa está muy lejos. Y tiene que venir corriendo corriendo mucho para llegar pronto y venir a clase.
- Sí, vienen todas las profesoras juntas.
- ¿Y por qué no vive en Miranda? Porque Burgos está muy lejos.
- Todavía no sabe si el año que viene va a estar en tu cole, no la han dicho si va a seguir siendo tu profesora, así que no puede venir a vivir a Miranda.
David se queda pensando.

- Mamá, tú sabes si Yolanda tiene ordenador.
- Sí, en el cole tenéis, lo he visto esta mañana en tu clase.
- No, yo no digo en el cole, digo en su casa.
- Supongo que sí.
- Es que así puede mirar en el ordenador para buscar una casa para vivir en Miranda.
- Claro que sí, David.

Este niño tan preocupado por su profe.

EL CUMPLEAÑOS DEL NIÑO JESÚS

David cumplió 5 años el día 1 de junio, así que ahora está pendiente de lo de cumplir años y cuándo es el cumpleaños de sus amigos, de su papá, de su mamá, del yayo, de la yaya....

Ayer cuando nos fuimos a dormir, me preguntó:
- Mamá, ¿cuándo es el cumpleaños del niño Jesús
- El 25 de diciembre, el día de Navidad-le contesté.
- ¿Y cuántos años cumple?
- Pues mira David, el niño Jesús nació hace muchos años, pero como hace magia, pues siempre es un bebé.
- ¿Muchos años? ¿Cuántos años?
- Pues nació en el año 0, así que hace 2012 años nació, pero hace magia...
- Ahhh, hace magia y siempre es un niño.

Supongo que el día 25 de diciembre me volverá a preguntar y se acordará de esta conversación.